Lejos de ser una cuestión esporádica o anecdótica, la corrupción en el Perú se manifiesta como una realidad sistémica, que ha definido la forma en que los peruanos construimos nuestras relaciones sociales, políticas, económicas y culturales.

Partimos de la indignación, pero el objetivo es entender y expresar a través de lo escénico qué pasó, qué pasa y por qué se presenta como un fenómeno orgánico en nuestro sistema. A pesar de que lo naturalizamos al decir que “así es el Perú”, “que todos son corruptos”, no se trata de algo natural ni cultural, sino de un fenómeno que tiene causas arraigadas, que no son ni deben ser un para siempre.

Es un tema complejo, que conecta pasado y presente. Si hoy reemplazamos los nombres de los protagonistas de la corrupción en el pasado por los actuales, veremos que nuestro país no ha cambiado mucho. La corrupción es un fenómeno constante que atraviesa todas las instancias institucionales, de modo que es el motor de un círculo vicioso que impide el desarrollo del bienestar.

Mientras hoy nuestros presidentes se reúnen en la cárcel; nosotros, como peruanos, ¿nos reconocemos como parte de este círculo vicioso? ¿Somos conscientes de ello? ¿Hay un final para este ciclo?

Dirección: Beatriz Heredia Narváez
En escena: Job Mansilla, Gretha Bazán, Daniela Trucíos, Walter Ramírez y Pedro Cáceres
Asistencia de dirección: Giovanni Oviedo
Dramaturgia: Daniel Subauste
Producción: Pamela Stewart
Dirección de arte: Beatriz Chung

Mentoría FAE Incuba: Alfonso Santistevan 

Sobre la directora
Beatriz Heredia Narváez
Actriz, docente, directora y gestora teatral independiente. Egresada de la Dirección y Puesta en Escena (EMAD), el Posgrado Internacional Gestión y Política en Cultura y Comunicación (Flacso) y el Seminario de Posgrado en Comedia del Arte (UNA).
Dirigió La metamorfosis, adaptación propia de Kafka, Quítale peso o el pecado de no encajar en el estrecho molde que la sociedad había reservado para mí, ganadora del premio Oficio Crítico 2021 a mejor dirección, mejor actor, y fue parte del FAE 2022. Así como La fiesta de los invisibles y En mi salsa – Crónica de un viaje a la raíz, ganadora de Oficio Crítico 2022 al mejor montaje unipersonal, mejor dirección y mejor actor.
Desde el 2021, dirige Ruda – Laboratorio de Creación Escénica para Mujeres, proyecto ganador de Estímulos Económicos para la Cultura 2021 y 2022 del Mincul y parte del Programa de Mentorías DASH.

Sobre el dramaturgo
Daniel Alejandro Subauste Oliden
Ingeniero de Sistemas y magíster en Administración y Dirección de la UPC. Se formó con Mariana de Althaus, Alonso Alegría y César de María. Estrenó más de diez obras para Microteatro-Lima. Asimismo, Silverio en el café (2016), Las aventuras del doctor Quark para el CCPUCP (2016) y Honorarios exitosos en el III Festival de Escenas Cortas de ENSAD (2019). Ganador del Concurso Nacional de Dramaturgia TeatroLab con su obra El enemigo (2019). Fue seleccionado en la convocatoria De la Hoja al Zoom del Centro Cultural Británico con la obra 2084 (2020) por la que ganó el premio Luces de El Comercio el año 2021 en la categoría mejor dramaturgia peruana. El 2022 recibió el premio nuevamente por la obra El enemigo.

El objetivo de este espacio de deconstruyendo la idea es compartir desde la praxis de cada uno de los especialistas: ¿cómo se genera y desarrolla una idea?; y así fomentar un diálogo en donde se busca también cuestionar las ideas de cada proyecto a incubarse, para generar mayor profundización y otras miradas.

Sesión 1: Miguel Rubio Sharon Lernes

Sesión 2: Vanessa Vizcarra Max Hernández

Sesión 3: Ana Correa

Espacio escénico: Lorenzo Albani (Italia)

Investigación para la creación: María Caudevilla (España)

Dirección (el cuerpo en escena): Aby Watson (Reino Unido)

Contexto y coherencia (dramaturgismo): Miguel Rubio (Perú)